El lubricante tiene muchos beneficios en una relación sexual. Aún se cree que son indicados para mujeres con sequedad vaginal, debido a la menopausia o a otros factores externos. Y si que tiene esta función, pero no la única ni la más importante.
Se utilizan para aumentar la sensibilidad en la zona vaginal, de tal manera que se consigue mayor placer. No son sólo para mujeres, es decir, que se puede poner un poco de lubricante en el glande del pene del hombre, y éste puede tener mayor sensibilidad. También son indispensables cuando se quiere llevar a cabo un acto sexual rápido y espontáneo, ya que facilita la preparación de la mujer ( sin preliminares) y un mayor placer para ambos. Todavía se sigue creyendo que es para mujeres que tienen problemas de lubricación.
Para ello hay muchos tipos de lubricantes y debemos escoger el que mejor nos vaya, en función de para que lo queremos. Los más conocidos son los de base de agua, los cuales se pueden usar con todos los juguetes eróticos sin dañarlos y son los más seguros; y los de base de silicona, en esta categoria no se puden usar juguetes de silicona porque los daña y al tacto son muy agradables.
Comentaros que otra de las propiedades de estos, es que los hay de muchos sabores ( os quedarías sorprendidas de la diversidad) y además son comestibles. Permite realizar juegos preliminares con la pareja, combinandolo con sexo oral, caricias...
Podéis elegir el sabor que más os guste a vosotras o a vuestra pareja.
Juguemos con las sensaciones!! Otro aspecto a destacar, es que existen algunos que al aplicarlos en la zona genital producen una sensación: frio, calor... Estos cambios de temperatura y de sensaciones en un ambiente de diversión puede resultar muy atractivo y ayudar a alcanzar los orgasmos.
La aplicación es muy sencilla, poca cantidad en la zona que queráis estimular y a ser creativos... lo demás ya os lo dejo a vuestra imaginación!